Budín de espelta y coco para guerreros


Hay gente que tiene una mirada transparente, que aunque no entiendas su idioma basta que te miren para decirte un montón de cosas. Yo tengo la suerte de conocer muchas de esas personas pero una en especial es la que me trae hoy a escribir esta receta. 
Su nombre es Hagos, no tengo una foto suya porque está en un programa de protección, este hombrecito flaquito, moreno, con ojos grande y sonrisa gigante ha pasado no quiero saber por cuantas cosas en su vida, es un exiliado de la guerra y cayó en nuestras vidas para enseñarnos a ser generosos y honrar nuestro trabajo. 
Nosotros no nos entendemos pero lo mismo conversamos a diario, cada vez que paso a su lado lo saludo y le agradezco que nuestra escuela esté simple reluciente gracias a su empeño, paciencia y amor y él me sonríe y me dice, Danke, Danke, creo que sabe solo tres palabras pero su táctica para usarlas nunca falla.
Cada día me acerco y charlamos, cada uno en su idioma, total que ni nos entendemos pero nos reímos juntos y pasamos un momento divino, tanto es así que los niños me dicen: preguntale vos que le entendés; como les explico a esas inocentes criaturas que yo tampoco lo entiendo solo sé que tanto para él como para mí esta amistad es re importante, no importan las barreras, yo se que un momento del día puedo distraerlo de sus recuerdos y es la única forma que tengo para hacerle la guerra a esta maldita guerra. 
Hagos limpia los vidrios un montón de veces al día y siempre con una sonrisa, limpia el piso y todos entramos con las botas llenas de nieve y nos disculpamos y con esa sonrisa nos dice: no importa, pasen, pasen! (o eso es lo que creo que nos dice, quizás que nos está re puteando y yo romántica total creo que nos invita a pasar).
En medio de la nieve está con su pala que el mango es mas gordo que él, pero con calidad de guerrero saca la nieve y la amontona para que los piojos aguerridos puedan hacer sus muñecos de nieve. 
Hagos juntaba las hojas de otoño y el viento se las volaba y él reía entusiasmado y alguna vez hicimos guerra de hojas y su risa se transformó en carcajada. 
No se cuantos años tiene, no puedo calcularlo, pero parece que eso no le importa, no he visto que faltara nunca a su trabajo ni que se quejara al hacerlo, todo lo contrario, nos mostró a todos como de orgulloso estaba de poder hacerlo.
El viernes fue el último día de su práctico y para despedirlo le hice este budincito.

Chau Hagos, gracias por haber pasado por mi vida, te voy a extrañar y ruego algún día volver a cruzarte y ver que no cambió esa mirada y esa sonrisa guerrera! 

Ingredientes:

175 gr de Manteca blanda
175 ml de Leche de coco
250 gr de Azúcar morena de la mas morena como la piel de Hagos
3 Huevos
1 cdita de pasta de Vainilla o las semillas de una vaina 
6 cucharadas de coco rallado (yo lo tosté un poquito en la sartén para que quede mas crocante)
225 gr de Harina de espelta o harina común 
1 cdita de Polvo de hornear (levadura royal)
1 pizca de Sal

100 gr de chocolate 70% cacao o el que les guste
2 cdas de copos de Coco tostados

Preparación:

Precalentamos el horno a 165°

Batimos la manteca con el azúcar, la sal, los huevos, la vainilla, agregamos el coco rallado y la leche y volvemos a batir, y por ultimo agregamos la harina previamente tamizada con el polvo de hornear, logramos una crema uniforme y al horno en una budinera preparada con papel de horno o enmantecada y enharinada.
Horneamos 80 minutos aproximadamente 
Una vez que la sacamos del horno la dejamos 20 minutos en el molde y después recién desmoldamos y dejamos enfriar completamente.

Derretimos el chocolate y bañamos el budín agregando por último los copos de coco o coco rallado.


Llevo tantos años despidiéndome de gente querida y todavía no aprendí a como hacer para que no duela.
Pero con un trozo de este budín por lo menos endulzo mi tristeza.

Hasta pronto mis amigos, perdón, no los había saludado!!!

Comentarios

  1. Chocolate y coco, una combinación deliciosa.
    Bss

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ooooooo si Rosa, una combinación que no falla, una de mis favoritas.
      Gracias por visitarme.
      Besitos

      Eliminar
  2. Respuestas
    1. Siiiiii o poné toda la patota mas chica a que la hagan, que al final son ellos la que la comen.
      Besos hermanita querida!

      Eliminar
  3. Ohhh, qué hermosa historia. Sí, conozco ese deseo superior que te arrastrar a comunicarte a pesar de la barrera de idioma. Es como sonreír sin entender el chiste solo porque deseas compartir el chascarrillo sea cual fuere. Los sentimiento son así, se escapan más allá de las palabras inteligibles. También he aprendido que quienes no desean darse a entender no hay quién les pille ni una papa hasta en el mismo idioma. Por eso, cuando alguien con solo 3 palabras nos dice tanto, eso es algo grande. Como tu pudin, que también lo dice todo.

    Gracias por volver, gracias por compartir tus dulces y tu vida. Gracias Vicky por estar ahí :-) te quiero mucho materita!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mai querida, es verdad cuando uno quiere puede comunicarse en cualquier idioma y también es verdad que hay gente que no le interesa hacerlo ni en su propio idioma, pero por suerte creo que tenemos la suerte de darnos rápidamente cuenta de cuales son y pasar de ellas, no hay que perder el tiempo con ese tipo de personas.

      Yo te agradezco a vos que me empujaras !
      Te quiero

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares